Un gran fracaso por jugársela.

Ayer vimos como los sueños de los 45.000 habitantes de la pequeña ciudad de Villarreal se venían al suelo. Esta ciudad que si no fuera por su equipo de fútbol no sería conocida por nosotros, hoy ya está en boca de todo el mundo. Esta ciudad ve como semana a semana, la mitad de su población asiste al estadio a alentar a su club, y en las últimas semanas, soñaba con llegar a la final de torneo de clubes más importante del mundo.

Pero ayer el sueño se acabó, y hubo que enfrentar la realidad. Pero no es una realidad triste, sino que lograron quedar entre los cuatro mejores clubes del viejo continente; lo que no es poco para un club que apenas unos pocos años atrás peleaba por estar en primera división.

Las claves del equipo: En la banca, un chileno, que extrañamente cuando estuvo en Chile llevó a segunda división a un equipo que nunca en su historia había visitado esos lugares. El mediocampo, para un genio, Juan Román Riquelme.

Como despertaron del sueño? Con un empate de local 0-0 con el Arsenal de Inglaterra. Pero lo más triste del despertar, fue la forma. Minuto 89, penal a favor del Villa... la toma Riquelme, y según lo que algunos dicen, con la vista perdida, desperdicia el lanzamiento como ya lo había hecho en un momento decisivo el año pasado en la UEFA.

Pero Juan, estos momentos sólo los vive el que se arriesga. Entiendo que quizá la próxima vez la pensarás no dos, sino tres veces antes de patearlo. Pero la pregunta que deberías hacerte es ¿Prefieres la culpa de por qué lo tiré y fallé? o bien ¿La culpa de por qué no me arriesgué?

Entiendo que pueden haber condiciones que nos hacen no tomar riesgos, porque sabemos que no es el momento. Pero pienso que la vida es un lugar para jugársela, pero jugársela bien, no sólo por nosotros mismos, sino principalmente por otros.


Una de mis películas favoritas, "La Lista de Schindler", muestra como a pesar de que el personaje principal, Oskar Schindler gastó casi todo lo que tenía por otros no quedó contento, pues vió que lo poco que se guardó, se podía haber usado en beneficio de otros.

Por eso creo que esta vida es para jugársela. Son pocos años, no es tan larga, y este poco tiempo se debe usar bien, se debe gastar en lo que conviene. Como dijo T.S.Elliot "No es un tonto, el que da todo lo que no puede retener, para ganar aquello que no podrá perder".